domingo, 9 de enero de 2011

Pastel de espinacas.


Ya se terminó oficialmente la Navidad, y aunque siempre da un poco de pena, a mí al menos me apetece volver a la vida "normal". Estos primeros días del año siempre salen a la luz un montón de buenos propósitos, aunque yo ya no hago ninguno, porque suelo ser muy mala a la hora de cumplirlos, así que he decidido no machacarme a mí misma con metas a las que luego soy incapaz de llegar.

 A pesar de eso, ¿quién es el guapo que, a 9 de enero, no odia ese pantalón, que le quedaba fenomenal antes de las fiestas, pero en el que es imposible entrar a día de hoy?. 

Así que, pensando en el pobre pantalón, que no tiene la culpa de nada, y en esa crisis que no nos permite renovar nuestro fondo de armario, habrá que adelgazar, ¿no? 



Tenéis razón, esta foto es de una comida que no nos va a ayudar a adelgazar mucho,
pero está buenísima. Y es que este es un blog de dulces,
así que aquellos que vayan buscando dietas a primeros de año, no van a caer por aquí.

No obstante, este pastel no lleva azúcar, y además, está hecho con espinacas ....
algo más  "adelgazante" que eso, creo que no vais a encontrar por estos lares....


PASTEL DE ESPINACAS

Ingredientes:

Dos láminas de hojaldre de unos 250 gr.
400 gr. de espinacas cocidas.
Una cebolla.
200 gr. de tiras de bacon.
Salsa bechamel.
Queso rallado.

He de confesar que paso mucho tiempo en la cocina haciendo dulces, pero bastante menos con el salado, (supongo que, como no tengo chiquillos a los que alimentar, la cocina para mí es solamente una diversión y en las comidas del día a día me esfuerzo poco) así que esto es muy fácil y rápido de hacer.

Sacamos del congelador las láminas de hojaldre para que se vayan poniendo a temperatura ambiente, y en ese intervalo, vamos cocinando en una sartén la cebolla bien picadita, junto con el bacon y las espinacas cocidas, y cuando ya está hecho, le añadimos la bechamel, para la que tengo una receta también muy fácil y rápida, que pongo al final para no interrumpir demasiado.

Una vez tenemos el relleno hecho, lo ponemos en una lámina de hojaldre, y le echamos por encima queso rallado; cubrimos con la otra lámina, las unimos utilizando un tenedor, así quedan las rallitas esas tan monas alrededor, y pintamos con huevo. Al horno a unos 220 º durante unos 10-15 minutos. Y ya está, y os aseguro que a todos los que lo han probado les ha encantado.

Ahora, la receta de la SALSA BECHAMEL, que hay mucha gente que no se atreve con ella, pero es muy fácil y a mí, por lo menos, me encanta!!!!

1/2 litro de leche
3 cucharadas de harina (puede ser de trigo o maicena, yo uso las dos y sale bien con cualquiera de ellas)
Unos 30 ml. de aceite (la mantequilla ya la tomo mucho por otros lados)
Sal.
Nuez moscada.

Mezclamos el aceite con la harina y añadimos poco a poco la leche fría, la sal y la nuez moscada, lo que conseguimos al hacerlo en frío es que no salgan grumos, y una vez todo mezclado, lo ponemos en un cazo a fuego lento hasta que hierva unos segundos, sin dejar de remover todo el rato con una cuchara de madera para que no se nos pegue al fondo. 

¡Qué aproveche, sea lo que sea que decidáis comer estos días!



2 comentarios:

  1. Tiene que estar muy bueno, Lola. Y seguro que es una buena forma de hacer comer verdura a los más reticentes.
    Besos.

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  2. Seguro que sí, con este pastel no necesitamos a Popeye que nos inculque lo ricas que son las espinacas.
    Un beso.

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Gracias por pasar por aquí y comentar.
¡Que tengas un dulce día!